La separación entre los chopos, espaciamiento, nos define el marco de plantación y los metros cuadrados de terreno que le vamos a asignar a cada planta para su desarrollo.
El espaciamiento establecido en cada terreno condiciona el turno óptimo que son los años que necesita el chopo para conseguir un tamaño que nos reporte el máximo rendimiento económico. A partir de este momento, el crecimiento se reduce drásticamente debido a la competencia por falta de espacio.
Un marco de plantación mayor requiere un turno más largo, pero se obtiene un árbol de mayor diámetro. Por ejemplo: en un terreno bueno con un espaciamiento de 6 metros, 278 chopos / ha, se puede fijar un turno óptimo de 15 años y alcanzar un tamaño medio del árbol de 1 metro cúbico (crecimiento medio ha/año de 18 m3). En el mismo terreno pero con un espaciamiento de 5x5, 400 chopos/ha, se puede fijar un turno óptimo de 13 años y alcanzar un árbol medio de 0,65 metros cúbicos (20 m3/ha/año pero de menor valor/m3).
El desarrollo también viene condicionado por la riqueza y profundidad del terreno; a mayor calidad, mayor número de chopos. En general, plantando más de 400 chopos/ha sea cual sea el terreno, difícilmente alcanzaremos un tamaño de tronco suficiente para procesar en industrias de desenrollo o contrachapado.