Los chopos, también llamados álamos o sauces, son árboles y arbustos originarios de zonas templadas y subtropicales, pertenecientes a la familia botánica de la salicáceas. Se caracterizan por su extraordinaria avidez de agua y de luz. La familia tiene dos géneros: Salix (sauces) y Populus (chopos o álamos). Tienen preferencia por los hábitats húmedos, las llanuras inundables y las riberas fluviales. Generalmente son de crecimiento rápido, teniendo gran aptitud para la reproducción vegetativa y para la hibridación interespecífica.
El chopo es un árbol esbelto, de porte cilíndrico, que puede alcanzar gran talla (hasta 30 m). Su tronco es recto, con la corteza inicialmente lisa de color gris verdoso que posteriormente se va oscureciendo y agrietando.Tiene hojas simples, alternas y caedizas, generalmente anchas, con bordes de forma variable. Su pecíolo es largo, a menudo aplanado, lo que da gran movilidad a la hoja. Tiene flores masculinas y femeninas dispuestas en árboles diferenciados. Estas flores están dispuestas en grupos o amentos generalmente colgantes. El fruto es capsular y sus semillas están recubiertas con un penacho algodonoso que favorecen su diseminación por el viento.
Suministran diversos productos (madera aserrada, rollizos para chapas, leñas, postes y forraje), además de otros servicios como protección para los suelos, los cultivos y el ganado, y de su valor estético en parques y jardines.
Tradicionalmente los álamos se han integrado en muchos sistemas agrícolas con clima templado o subtropical, surgiendo recientemente un nuevo ámbito de aplicación dado el interés que tiene su utilización como biomasa para la energía renovable, así como su valor medioambiental.
Los álamos y sauces son fáciles de multiplicar por medios vegetativos (esquejes y estaquillas). Estas características permiten desarrollar nuevos cultivares facilitando a los cultivadores multiplicar con rapidez y sencillez la descendencia de determinados árboles con atributos deseables (crecimiento rápido, fuste recto, madera blanca, etc.). Este procedimiento llamado clonación, que permite el establecimiento de plantaciones artificiales con determinadas características, tiene sus inconvenientes si un clon determinado resulta susceptible al ataque de una plaga o enfermedad, lo que ha motivado que en los últimos años se tienda a la conservación y mantenimiento de poblaciones naturales de álamos y sauces como salvaguardia y como reserva de la variación genética autóctona para responder a necesidades futuras.
El cultivo del chopo en España, se ubica en las tierras bajas de aluvión, próximas a los cursos de agua, asociado a las explotaciones agrícolas o a los terrenos de ribera pertenecientes a los Ayuntamientos.
Se hace una distinción entre masas naturales, de las que forman parte las tres especies autóctonas, Populus alba, Populus nigra y Populus trémula, y las plantaciones de chopo dedicadas principalmente a la producción de madera, formada por los clones híbridos de Populus sp. Los clones de chopo admitidos oficialmente como materiales de base del género Populus L. son los 14 clones establecidos en el primer Catálogo nacional según Orden de 24 de junio de 1992 (BOE nº 179 de 27 de julio de 1992) y su posteior ampliación con otros 14 clones establecidos en la Orden APA/544/2003 DE 6 de marzo DE 2003 (BOE nº 63 de 14 de marzo de 2003).
Las plantaciones de chopo son un cultivo forestal a corto plazo, considerándose como actividad agrícola y forestal simultáneamente. La condición de la mayoría de los propietarios de choperas es la de no ser agricultores a tiempo total o a título principal (ATP) y no depender económicamente de la explotación de chopos. Hay también otros tipos de propietarios o cultivadores de chopo como son las Confederaciones Hidrográficas, los Ayuntamientos, etc., además de las plantaciones gestionadas por las Comunidades Autónomas.